Entrenar a tu cachorro para que camine con una correa suelta, bajo control y sin tirones es una parte esencial de su educación. Pero, ¿a qué edad debe comenzar a caminar con correa? ¿Se puede empezar a entrenarlo desde la primera semana en casa? Aquí responderemos esas preguntas y más, incluyendo cómo corregir algunos comportamientos traviesos relacionados con la correa.
¿Cuándo Comenzar el Entrenamiento con Correa?
El entrenamiento con correa puede ser una de las primeras lecciones que aprenda tu cachorro, junto con órdenes básicas como «sentado», «quieto» y «ven». Incluso con solo unos meses de edad, tu cachorro puede empezar a familiarizarse con el collar, el arnés y la correa, preparándose para aprender a usarlos correctamente.
Equipo: El Tamaño Importa
El collar de tu cachorro debe quedar bien ajustado, pero sin apretar. Asegúrate de que no esté ni demasiado holgado ni demasiado apretado, para que le resulte cómodo. Revisa el ajuste con regularidad mientras tu cachorro crece y cambia de tamaño. Si usas un arnés, asegúrate de que también tenga el tamaño adecuado. La correa ideal debe medir entre 1,20 y 1,80 metros para que tu cachorro pueda moverse cerca de ti mientras entrena. Una vez que haya aprendido a caminar con la correa suelta, puedes cambiarla por una más larga.
Recuerda que los cachorros son excelentes para morder y destrozar cosas, así que revisa la correa, el arnés y el collar regularmente para asegurarte de que no se hayan dañado.
Comienza en el Interior
El hogar tiene menos distracciones que el exterior, por lo que es el lugar ideal para empezar a entrenar. Elige una habitación tranquila, sin demasiados juguetes u otros estímulos. Deja que tu cachorro huela y explore la correa, el collar o el arnés, y felicítalo cuando lo haga. Luego, colócale el collar o el arnés y deja que se acostumbre a ellos antes de añadir la correa. Jugar con su juguete favorito durante este proceso puede ayudar a que sea más agradable para él.
Practicando con la Correa
Una vez que tu cachorro esté cómodo con el collar o arnés, ponle la correa y empieza a caminar por la casa. Haz que se quede quieto a tu lado con la correa suelta. Si lo hace, felicítalo y dale una golosina. Da un paso y, si sigue a tu lado sin tirar, recompénsalo de nuevo. Repite este proceso hasta que tu cachorro camine contigo sin tirar de la correa.
Recuerda que los cachorros tienen una capacidad de atención limitada, así que mantén las sesiones de entrenamiento cortas, de unos minutos. Realiza varias sesiones breves al día, y detén el entrenamiento si tu cachorro se distrae o se aburre.
Salir al Aire Libre
Cuando tu cachorro ya camine bien con la correa en el interior, es hora de enfrentar algunas distracciones. ¡Una ardilla! ¡Un pájaro! ¡Una gran roca! En el exterior, las distracciones son muchas, así que usa golosinas más apetitosas para mantener su atención. También puedes caminar más rápido para ayudar a pasar por encima de las distracciones. Hasta que tu cachorro esté completamente vacunado, evita áreas con muchos perros desconocidos, como parques para perros.
¿Qué Hacer Cuando Tu Cachorro Tira de la Correa?
Es inevitable que tu cachorro quiera ir en una dirección diferente a la tuya. Si esto sucede, simplemente detente y quédate quieto. Cuando tu cachorro regrese a ti, felicítalo y recompénsalo. Luego, continúa caminando. Repite este proceso hasta que entienda que caminar a tu lado sin tirar es lo que se espera de él.
Evitar los Juegos de Tira y Afloja
Es común que los cachorros jueguen mordiendo la correa, pero esto no debe convertirse en un hábito. En lugar de usar comandos como «suéltalo», que podrían reforzar el comportamiento de morder, recompensa a tu cachorro cuando no muerda la correa y se comporte bien. También puedes distraerlo con un juguete durante los paseos o retirarle la correa de la vista para evitar que la muerda.
Consejos Finales
Entrenar a un cachorro para caminar con correa es mucho más fácil que con un perro adulto, por lo que, aunque tome algo de tiempo, ¡vale la pena! Si tienes dificultades durante el entrenamiento, prueba nuestros consejos para hacerlo más fácil. Y si tu cachorro aún no domina el uso de la correa, consulta a tu veterinario para obtener más ayuda.